El equipo representativo de nuestra capital, el histórico Real Jaén CF, inicia una nueva temporada y lo primero que nos tiene que llamar la atención a todos los jienenses, con independencia de ser o no aficionados activos, porque por encima de eso está la simpatía por los colores y por lo que representan, es una campaña en la que están ausentes los complejos y por primera vez se apuesta por la ambición de empezar una temporada en la que el objetivo es ir a por todas; y también es inédito que una directiva se proponga de entrada el objetivo prioritario de conquistar la Segunda A, que es la idea que inspira la campaña de captación de socios que está en marcha. Las declaraciones continuadas del presidente de la entidad, Carlos Sánchez, pero ahora muy especialmente del responsable de dirigir la parcela deportiva, Carlos Terrazas, no llaman a la duda, y ha dicho el entrenador que hay que empezar con la idea clara de que se pretenden las máximas aspiraciones. Terrazas, hay que reconocerlo, fue un revulsivo para el Real Jaén, desde su llegada, y sin que esto sirva de menosprecio alguno para las personas que antes ocuparon su misma responsabilidad, el equipo empezó a reaccionar y el resultado fue que terminó su campaña en una posición de fuera de peligro cuando mediada la temporada se percibían los peores pronósticos.
El club ha puesto su empeño en manos de Terrazas, toda una enorme responsabilidad, por lo cual desde el primer momento queremos desearle que esta aventura, en la que él parece el primer ilusionado, esté acompañada por el éxito. Se parte con un enorme capital de entusiasmo y de fe en el proyecto, que se ha tenido que hacer compatible, tal y como mandan los tiempos de crisis, con una política de austeridad en el gasto y con la intención de optimizar de la mejor manera los recursos disponibles, por lo cual la plantilla se quiere recomponer más desde la calidad que de la cantidad de los futbolistas, razón por la cual ya se ha puesto a trabajar el grueso del colectivo, y sólo se esperan incorporaciones muy contadas para reforzar las líneas que Terrazas considera deben quedar resueltas para disponer de un equipo que, como conjunto, pueda ser competitivo y dar respuesta a esas expectativas con las que se ha preparado el trabajo de una temporada. Ahora los aficionados deberían dar una respuesta contundente de apoyo a un Real Jaén cuyas aspiraciones no serían nada si le falta la guinda, lo más importante, el apoyo de la masa social que además últimamente, y en momentos no tan propicios, ha sabido estar a la altura de las circunstancias y al lado de su equipo. Pensamos que éste Real Jaén no sólo necesita sino que merece crédito y confianza para que sus aspiraciones se cumplan. Por lo demás todo lo que sea bueno para el Real Jaén es bueno para nuestra ciudad.
El club ha puesto su empeño en manos de Terrazas, toda una enorme responsabilidad, por lo cual desde el primer momento queremos desearle que esta aventura, en la que él parece el primer ilusionado, esté acompañada por el éxito. Se parte con un enorme capital de entusiasmo y de fe en el proyecto, que se ha tenido que hacer compatible, tal y como mandan los tiempos de crisis, con una política de austeridad en el gasto y con la intención de optimizar de la mejor manera los recursos disponibles, por lo cual la plantilla se quiere recomponer más desde la calidad que de la cantidad de los futbolistas, razón por la cual ya se ha puesto a trabajar el grueso del colectivo, y sólo se esperan incorporaciones muy contadas para reforzar las líneas que Terrazas considera deben quedar resueltas para disponer de un equipo que, como conjunto, pueda ser competitivo y dar respuesta a esas expectativas con las que se ha preparado el trabajo de una temporada. Ahora los aficionados deberían dar una respuesta contundente de apoyo a un Real Jaén cuyas aspiraciones no serían nada si le falta la guinda, lo más importante, el apoyo de la masa social que además últimamente, y en momentos no tan propicios, ha sabido estar a la altura de las circunstancias y al lado de su equipo. Pensamos que éste Real Jaén no sólo necesita sino que merece crédito y confianza para que sus aspiraciones se cumplan. Por lo demás todo lo que sea bueno para el Real Jaén es bueno para nuestra ciudad.
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