No fue una rueda de prensa, puesto que al terminar su alocución abandonó el estrado y se marchó. A continuación ofrecemos, con reportaje fotográfico de CARDI FRÍAS, el texto íntegro de lo que dijo:
Buenas tardes a todos. Gracias por atender esta inesperada comparecencia que espero sea breve pero lo suficientemente representativa. No soy un hombre de palabras vacías ni de medias tintas.
Hasta aquí hemos llegado. No puedo más. Quiero aquí y ahora presentar mi dimisión irrevocable como presidente del Real Jaén con fecha 30 de junio. Quiero decir que, el mismo día que el Real Jaén juegue su último partido oficial de esta temporada, dejaré de forma definitiva la presidencia del Real Jaén. Pase lo que pase a final de temporada, presento mi renuncia expresa a continuar como presidente del Real Jaén c.f. sad.
En la vida no importa quién seas ni de dónde vengas, todo el mundo merece una oportunidad, y yo la mía la tuve hace siete años. Siete años de lucha en los que la actitud ha sido la clave; vosotros sabéis la de veces que nos hemos caído y que nos hemos vuelto a levantar. Siete años que se acercan a su final.
Os preguntaréis por qué aquí y por qué ahora. Y quiero decir que lo anuncio en este momento porque quiero que los aficionados sepan de primera mano y de mi propia voz, cuáles son mis intenciones como todavía presidente, y haya el tiempo suficiente – si fuera necesario- para digerir la decisión. No hay marcha atrás.
De los malos momentos también salen cosas positivas, nunca me he dado por vencido porque siempre había algo nuevo que me hacía soñar. El afán de superación es lo que te hace crecer. En mi vida personal y en el Real Jaén siempre he estado convencido de que lo más importante es arriesgarse y seguir caminando hacia adelante porque todos tenemos un camino por recorrer. Sin embargo, en la vida hay que saber decir basta. Y lo digo hoy por dignidad.
Algunos sentirán alivio al escuchar estas palabras, otros indiferencia y puede que los haya incluso que sientan tristeza. El hecho es que me marcho con la firme convicción de que es lo mejor para la entidad; lo haré al final de esta temporada porque no pienso abandonar el barco a medio trayecto y porque no me perdonaría dejaros en mitad del camino. Después de 7 años de lucha diaria, y de haber dilapidado mi salud y mi patrimonio, tengo que deciros lagartos, que al final de esta temporada, ya no volveré a ser vuestro presidente. Mi ciclo ha llegado a su fin.
Ahora bien, no penséis que bajo los brazos, ni que entrego la cuchara. Continúo adelante con la firme convicción de que vamos a ascender al final de temporada, pero, sólo quiero dejar claro ahora para evitar especulaciones o cualquier tipo de rumor que pueda desestabilizar a la entidad, que ésta será mi último viaje al frente de la nave.
Es una decisión preparada y meditada. Quiero que sepáis que los capitanes ya están informados de todo y que la misma no va a influir ni un ápice en el rendimiento deportivo del equipo. Ahora más que nunca, todos somos una piña y vamos a conseguirlo. Vamos a ascender.
Los motivos que me han llevado a dar este paso son claros y diáfanos. Me siento solo, más solo que nunca, en el ámbito económico y financiero, pero en lo personal y humano inmejorablemente acompañado. A excepción hecha de vosotros incansables aficionados, este real Jaén mal vive sin que nadie haga nada por remediarlo. Jiennenses todos, desde el más influyente hasta el menos relevante, si queréis Real Jaén, dad un paso al frente y luchad por él. Mi hora ya ha llegado.
Haciendo mías unas palabras tan significativas como las que son en este día de Andalucía, os animo a que luchéis bajo la frase “Jaén levántate brava, sobre tus piedras lunares, no vayas a ser esclava, con todos tus olivares, andaluces de Jaén”. Luchad por demostrarlo en el estadio, en la oficina o en el tajo, en el café o saliendo a la calle si llegara el momento.
No voy a arremeter contra nadie porque no es necesario, no voy a nombrar culpables porque caerán por su propio peso y ellos lo saben, simplemente quiero dejar clara mi voluntad de luchar con todas mis fuerzas hasta el final de esta temporada y que, entonces, sea otro el que tome el mando. que cada uno, en todos los ámbitos y parcelas de nuestra sociedad se mire a sí mismo, y piense si de verdad quiere que el Real Jaén siga viviendo, y si él o ella está haciendo todo lo que tiene en su mano para que así siga siendo.
Esta es mi última comparecencia y quiero aprovecharla para dos cosas.
La primera es para despedirme y para agradeceros el trato que me habéis brindado durante estos siete años. Con mis aciertos y con mis errores, vosotros habéis contribuido a hacer posible el sueño de que un Real Jaén literalmente muerto deportiva, económica e institucionalmente en 2003, sobreviva hasta este momento.
Y la segunda es pediros que apretéis los dientes. El año pasado todos nos llevamos una terrible decepción en el último momento de la liga pero tenemos que ser fuertes y mirar hacia adelante. Ya hemos superado durante estos meses ese duro varapalo y todos los acontecimientos posteriores y, a pesar de que algunos no daban un duro por nosotros, aquí está vuestro real Jaén de nuevo luchando entre los mejores.
Vamos a enterrar las supuestas hachas de guerra que existan entre nosotros en caso de que las hubiera; vamos a minorar las posibles diferencias, vamos a pensar sólo en que nuestro Real Jaén de 1922 lleva casi un siglo haciendo historia y nosotros somos parte de ella, y vamos a dar todo lo que está en nuestro interior para que el sueño del ascenso sea una realidad al alcance de la mano.
Termino amigos míos. Me voy. Con todo el dolor de mi corazón pero me voy. Pero no penséis que es una huida. Si alguien piensa que el Real Jaén tiene que morir, confiad en mí que seré yo quien aguante para que lo haga de pie. Se acabó. Hoy 28 de febrero es el último día que vamos a vivir arrodillados. Que nadie piense que voy a dejar al glorioso fundirse en las cenizas; antes caerá quien tenga que caer.
Gracias a todos.
¡Hala Jaén!