
Una vez que dejó de ser entrenador del equipo jienense, seguirá viviendo en Jaén, tal y como comentó en su despedida, pero esto no es óbice para que siga actuando con su particular filosófia de ver fútbol viajando con asiduidad a esos campos de Dios.
En concreto, el pasado miércoles estuvo en tierras murcianas donde viajó para presenciar el choque de Copa del Rey entre el Ciudad Lorqui y el Oviedo que terminó con triunfo local por 3-2.
Terrazas no pierde ni un sólo instante para incrementar su datos en torno a los diversos equipos, y aunque de momento su pensamiento no es entrenar, no sería extraño que cuando algunos equipos se coloquen en zona peligrosa, tenga ofertas para, tal y como ocurrió en el Real Jaén, acuda a salvarlos. Así que habrá que esperar, a pesar de que esposa trabaja en nuestra capital que Carlos Terrazas no tenga ofertas para volver a ocupar de nuevo un sitio en el banquillo, aunque ahora es difícil predecirlo.
