jueves, 1 de octubre de 2009

ANTONIO MORALES PONE LOS PUNTOS SOBRE LAS ÍES EN EL FÚTBOL BASE DEL RCD ESPAÑOL DE BARCELONA

El jienense, Antonio Morales, natural de Santiago de Calatrava y durante casi 25 años presidente de la UA Gramanet, es ahora el máximo responsable del fútbol base del RCD Español de Barcelona, al que quiere darle un aspecto totalmente diferente al que ahora tiene. Es decir quiere poner los puntos sobre las íes, para que se las acciones que se lleven a cabo tengan la etiqueta especial que él siempre ha dado al mundo de fútbo, pero sobre todo a la base.

En información firmada por María del Carmen Juárez, en el Diario Mundo Deportivo, queda claro el poder que tiene Morales en la parcela del fútbol base del conjunto 'periquito'. Con el titulo "El Español es un polvorín, esta es la información que ofrece el diario catalán.

"Antonio Morales, nombrado hace tres meses director del fútbol base del Espanyol, ha entrado en el club con la fuerza que le otorga el respaldo del presidente Sánchez Llibre, con un paquete de acciones bajo el brazo que le convertirán en consejero, y como elefante en una cacharrería. Dispuesto a cortar con etapas anteriores, el primero en conocer sus 'métodos' es José Manuel Casanova, durante años coordinador del fútbol base.
Ramón Planes, Casanova, Morales y Germán de la Cruz, directivos del Español. MUNDO DEPORTIVO.
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Coincidiendo con su aterrizaje, Casanova ha visto recortadas sus atribuciones al punto de no ser ya responsable del Espanyol 'B', equipo en el que la cabeza de su técnico, Josep Clotet, está al borde del cadalso. Casanova, sin ir más lejos, 'pasó' de posar en la foto con ocasión de la presentación, el martes noche, de los equipos inferiores del club. Allí, en Sant Adrià, ya hubo un 'petit comité' tenso. La guerra está servida. Al menos eso queda claro tras la 'explosión' ayer de Morales.
"Manel y yo hemos sido amigos durante 23 años. Pero su jefe soy yo. El que le da las órdenes soy yo y él tiene que atenerse a lo que se le diga. Es una persona que está muy bien remunerada, muy bien considerada, pero aquí no hay dueños del cortijo. Aquí no hay el señorito del cortijo. Aquí hay trabajadores que reciben órdenes que tienen que ejecutar después. Esto es una empresa y el que no esté a gusto, que lo diga y hablando se entiende la gente", espetó Morales a los micrófonos de Cope Miramar ayer tarde.
Morales dice tener las cosas muy claras sobre qué hacer y cómo. "El Espanyol ahora necesita cabeza y trabajo. Casanova es un hombre muy válido para el Espanyol pero tiene que hacer de lo que sabe y lo que sabe es ojear, ver y descubrir talentos, que ha descubierto muchos. Yo creo que lo demás sobra. Ni es gestor, ni es asesor de imagen, ni tiene que hacer nada más. Para lo demás ya estamos los que estamos".
El mensaje es claro, y a buen entendedor sobran detalles. "Se tiene que amoldar a los nuevos tiempos delclub. Por suerte, tenemos un entrenador en el primer equipo que quiere tirar de los de abajo. Pero para eso hay que organizar bien la casa, hacer el dibujo de la pirámide". Morales admitió que ayer habló con Casanova, y que no quería convertir el asunto en un culebrón . "Soy un directivo que regalo cada día cinco o seis horas al club. Soy el último que sale de la Ciudad Deportiva cada día. Jamás he pasado un euro de gastos al club. Estoy por ayudar. Lo demás huele a culebrón", dijo.
Tras volver a recordar que es el máximo responsable deportivo y económico de la Ciudad Deportiva, señaló que las directrices que se marcan "se tienen que seguir. Si alguien no está contento, yo escucho. Pero siempre para dentro, sin publicidad. Yo no estoy por tonterías. Le voy a dar una recomendación a Manel: tiene que hablar de puertas hacia dentro. De todo lo que sale puertas para afuera, el único perjudicado es el club". ¿Y si habla el jefe?"

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