Hoy en las páginas del Suplemento La Semana, del Diario JAEN, en la sección 'Hasta Siempre', escribo el siguiente articulo en homenaje al que fuera presidente de la Peña Deportiva 'Santo Reino', Manuel López Miergo, fallecido el pasado día 25 de Mayo.
Manuel López Miergo,
de Jaén
“Cuéntame como viviste,
en ese lugar privilegiado, la última jugada, del último minuto, del último
partido, del ascenso del Real Jaén”
Te fuiste, amigo Manolo, sin hacer ruido. Hasta el final te
comportaste como un hombre íntegro que luchaba con todas tus fuerzas para vivir
tranquillo en estos años en los que, una vez dejaste tu profesión, disfrutabas
con tu familia, con tus amigos, con los miembros de tu peña y, como no, con el
Real Jaén, entidad a la que querías como a tu propia vida.
Durante muchos años he estado cerca de Manolo López Miergo,
y tengo que decir, de principio, por si luego se me acaba el papel, que sus
intenciones en todo momento no eran otras que las de complacer a los demás. Con
estas líneas que Diario JAEN me ofrece para recordar a mi amigo, Manolo, quiero
que el lector descubra muchos de los grandes valores que poseía para ir por la
vida intentando apartar a los que le escuchaban del camino de la destrucción,
del egoísmo, de dejar de respirar odio, de patalear, porque muchas veces me
decía que no entendía cómo era tan difícil ir por la vida siendo respetuosos, complacientes,
condescendientes y bondadosos.
Y es que Manolo se sentía feliz y complacido ayudando a los
demás. ¿Cómo? Sintiendo de forma consciente y agradecida todo lo bueno que le
ofrecía la vida. Él así me lo decía cuando acudía muy a menudo a los estudios
de COPE JAEN para hablar de fútbol y del Real Jaén, o en el periodo navideño a
llevarme ese décimo de lotería de su peña ‘Santo Reino’ o aquel otro que le
habían traído de la administración ‘La Bruja de Oro’, de Sort, que con tanta
ilusión compartíamos.
Manolo López Miergo, mi amigo, ya no está con nosotros. Han
sido cuatro años muy duros para él y para su familia. Junto a sus hijos, su
esposa Ana sobre todo, se ha dejado media vida en el camino acompañando a su marido
en tantos y tantos momentos, en los que le ha ofrecido su cariño y
predisposición, compartiendo con él, y haciéndolo también suyo, el sufrimiento
intenso que abarcaba su cuerpo y su alma, y que ella mitigaba con su sonrisa
siempre dispuesta, con su amor, su generosidad, su cercanía y su inigualable
comportamiento de día y de noche.
Cuatro años han pasado desde que fuiste intervenido por
primera vez, amigo Manolo, coincidiendo aquellas fechas con la fase de ascenso,
la fatídica del Villarreal B. Cuatro años han pasado y ahora, que era el
momento de disfrutar con tu equipo, el Real Jaén, te vas, amigo Manolo. Tú
tenías claro que tu vida había llegado a su fin, y te preparabas para acudir a
ese lugar donde no hay odio, ni rencor, ni envidia… sólo esa generosidad que
has derramado allá por donde ibas.
Manolo, sabía que este año era el del ascenso del Real Jaén.
En una de mis visitas a ‘El Neveral’, junto al ‘lecho de muerte’, y en una breve
ausencia de su esposa Anita, me cogió la mano y, con la voz tenue y ya sin
fuerza, me dijo: “Manolo, este año el ascenso del Real Jaén no lo voy a ver, ni
a disfrutar”. Ahora, que ya te has marchado, seguro que sí, amigo Manolo, el
ascenso de ‘tu’ equipo, lo has disfrutado desde un lugar privilegiado, donde la
alegría y los festejos habrán sido aún más intensas por las formas que en ese
sitio se deben de celebrar los acontecimientos.
Espero que algún día, desde ese lindo lugar, cuando tengas
un rato libre, me digas cómo viviste los seis partidos últimos del Real Jaén;
los penaltis ante el Alavés; los duelos intensos y complicados ante el Lleida;
el gol de Migue Montes en Valencia, o lo que más me interesa, ese último minuto,
del último partido con el Huracán, en el que de un penalti a favor, se pasó al
instante que pudo ser amargo, pero que para que eso no sucediera, apareció,
como por arte de magia, ‘mi gitano’ Raúl Gaitán en la misma línea de gol, para
evitar la tragedia deportiva de nuestro equipo. Ya me lo contarás, algún día. Ahora disfruta
con intensidad los buenos momentos que se avecinan con el equipo de tus amores
en Segunda División.
Amigo, Manolo, cuídate. Anita, tus hijos, tus compañeros de
la Peña ‘Santo Reino, Paco, Pedro, Juan, Manolo, Antonio…; los de la Hermandad
de Donantes de Sangre, con su presidente Julián al frente, y todos los que te
queremos, no dejamos un solo instante de pensar en lo mucho y bueno que hiciste
para servir a los demás. Un abrazo. Para ti, mi siempre fraternal saludo: Paz y
Bien.
Manuel Contreras Pamos
Tu amigo
No hay comentarios:
Publicar un comentario