Su actuación el domingo fue excepcional, con una honradez que supera los límites de los cánones de la dignidad que pueda tener una persona, anotando, además, el tanto del Real Jaén.
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Servando, en los primeros instantes del partido frente al Deportivo Alavés, recibió un fuerte golpe de Juanma, quedando caído en el cesped. Se pudo recuperar y jugar el resto del partido con la cara desfigurada y su ojo izquierdo casi cerrado. Demostró ser un gran profesional.
Pues bien, aunque en un principio se temió lo peor, es decir que pudiera tener fracturado el pómulo, éste mediodía se le han realizado pruebas médicas, y según ha declarado en COPE JAÉN, el jefe de los servicios médicos del club, Felipe Ortega "podemos descartar que tenga fracturado el pómulo, si bien el miércoles le vamos a realizar un tac, con la intención de descartar una posible pequeño fisura".
El '6' blanco compareció tras el partido en sala de prensa y, a pesar del dolor, se mostró optimista en el doble sentido. Por un lado, corroborando un "Sí, se puede", y por otro, esperanzado de que su lesión no revistiese gravedad.
Esta mañana se ha entrenado con el resto de compañeros, lo que demuestra estar muy involucrado en el proyecto jienense.
Esperemos y deseemos que Servando no tenga tampoco fisura, y Manolo Herrero pueda contar con sus servicios el próximo sábado en 'Mendizorroza'.
